"Yo soy la luz del mundo. El que me sigue no andará en tinieblas, sino que tendrá la luz de la Vida".
Lunes 4 de
abril, san Juan 8, 12-20. "Yo soy la luz del mundo. El que me sigue
no andará en tinieblas, sino que tendrá la luz de la Vida".
Hoy la Palabra me lleva reflexionar que tanto en el tiempo de Jesús como ahora nos toca vivir momentos difíciles y de grandes paradojas. Tenemos a nuestra disposición posibilidades, comodidades y adelantos tecnológicos ni siquiera imaginados hace sólo unas décadas. Sin embargo, vivimos en un mundo con grandes desorientaciones.
Parece que hemos
optado por buscar la felicidad y el sentido de la existencia en los valores más
materiales e individualistas de la técnica, el consumo, el poder, el control,
la seguridad, el éxito, el dinero.
Como hombres, hoy tenemos la misma necesidad que aquellos de la época de Jesús, necesitamos alimentar nuestra alma, darle un sentido a nuestra vida, entonces me pregunto ¿Qué camino voy a seguir, el de las cosas terrenales que limita mi accionar o el de Jesús, que me llena de esperanza de un mundo mejor?
Señor Jesús, ayúdame a abrir el corazón para recibir esa Luz que viene de Vos. Que me deje iluminar por la luz de tu presencia y poder también ayudar a iluminar la vida de tantos hombres que necesitan conocerte para ser felices en el tiempo y en la eternidad. Amén.
Ref. Dominicos.org; Engeli.net. Donbosco.org.ar. Red Asís.
No hay comentarios:
Publicar un comentario